Este es el segundo juego que he elegido, me ha parecido que tiene una ambientación muy lúgubre, carece de diálogo ya que su finalidad la transmite a partir de la música y la imagen, que están muy bien logradas y las frases que aparecen en cada etapa me parecen muy adecuadas además de fascinantes.
El juego comienza con esta frase "Recuerde que la tristeza es siempre temporal. Esto también pasará" y consiste en un chico que representa la depresión metafóricamente, es decir, expresa esa idea en la figura del chico. En este juego se pueden apreciar tres partes, la principal es el bosque que sería el estado "normal" en el que se encuentra la persona, podemos observar que si el chico resuena dará color a los seres vivos que se encuentran en los árboles, también relacionado con objetos "pasión" o que le motive, haciendo que éste suba más rápido y más fácil hacia la "felicidad"que es otra parte del juego en el que la música se aviva pero llegado arriba del todo, vuelves a caer al bosque. El juego nos sorprende con una raíces gigantes que absorben al chico hacia un mundo por debajo del bosque, que es peor que el "normal" ya que si intentas salir te absorberá hacia más abajo aún haciendo que el espacio sea menor. En una de estas cavidades subterráneas acabamos viendo una luz que seguimos para salir de allí. Lo que más me ha gustado del juego son los dos finales alternativos, en la etapa final el chico puede dirigirse o bien a la luz (caminando hacia arriba) o bien al fuego y a la oscuridad (dejándose llevar hacia abajo). Al final nos aparece las estadísticas dependiendo del camino que hayamos tomado como también frases distintas y muy significativas en cada final alternativo.
Unas frases que me han marcado mucho han sido las de:
"No hay fin. Sólo hay pasión en la vida." o "¡Qué pasión no puede la música elevar y sofocar!
Al jugar a este juego me he sentido muy tensa, ya que la música de fondo y la estética hacían bastante, cuando subía a la cima me aliviada ya que nuestro personaje se encontraba en un entorno feliz y agradable, si crecían las raíces estaba preocupada porque no sabía que le iba a pasar a mi personaje y el momento en el que llegamos abajo del todo comencé a sentirme agobiada por no saber como salir de ahí. He sentido gran empatía por el protagonista mientras jugaba y me ha transmitido pena y tristeza.
Este juego no se lo pondría a cualquier persona, ya que es un poco fuerte y puede llegar a afectar bastante, aunque me parece muy importante que todo el mundo sepa el peligro que conlleva la depresión para ellos mismos y su entorno. Elegiría a personas concretas para este juego, como por ejemplo, a individuos cercanos a esta enfermedad (familias, amigos...) para que puedan llegar a comprender mejor la situación en la que se encuentra el sujeto en estado depresivo.
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